Cuando una pareja, generalmente enamorada, decide casarse no tiene forma de saber por cuánto tiempo durará ese contrato. En principio, se supone que será para siempre, según la famosa fórmula “hasta que la muerte los separe”; la realidad, podría ser muy distinta. Lo cierto es que, si la situación se vuelve insostenible, lo apropiado es llamar a unos abogados divorcio Cáceres.
Los matrimonios, comúnmente, desean seguir juntos, en especial, con hijos de por medio, que se convierten en víctimas inocentes. La mayoría de las veces los divorcios se vuelven un proceso muy desagradable y empeoran si hay grandes bienes que fraccionar, una de las partes se siente ofendida o ambos quieren la guarda y custodia de los pequeños.
Sin embargo, una convivencia difícil en la que no solo ha desaparecido la pasión; sino también el respeto, la comprensión y, sobre todo, la amistad, es perjudicial. La opción es continuar adelante por caminos diferentes e incluso, aunque no lo parezca, esto resulta mejor para los niños.
Después del divorcio, pertenecer a dos medios hogares, tener unos padres que no se toleran y los inconvenientes asociados, no les es beneficioso a estas criaturas en desarrollo. No obstante, es preferible a mantenerse en un ambiente agresivo.
De los males el menor…
En las familias donde uno de los padres insiste en conservar la relación; pero, abunda el maltrato verbal, las angustias y las desavenencias, se genera una atmósfera terrible que hace mucho daño a los involucrados. Los pequeños, particularmente, se sienten halados por emociones contradictorias, sentimientos de culpa y toda clase de pesares que afectan el rendimiento escolar, el estado emocional y, en ocasiones, la salud física.
En estos casos, los padres, por el bien colectivo y en consideración a aquello que una vez sintieron, deben buscar ayuda. La terapia de parejas, puede guiarles a entender esos elementos que los desunen y eliminarlos. Muchos matrimonios se han salvado con una consejería adecuada.
Si ninguna de las opciones da resultado o alguno ya se encuentra emocionalmente unido a una tercera persona, entonces lo que procede es divorciarse. Lo recomendable es que traten de lograrlo con el mínimo de traumas, para que el período de tensión y discordia sea lo más corto posible.
